Al menos 17 personas vinculadas al partido conservador trabajaron en la fundación Jaume II El Just hasta su disolución en 2017 con un agujero de más de ocho millones. Fueron directivos de la fallida fundación investigada los imputados Marcos Benavent –autodenomidado yonqui del dinero- y su exdirector Vicente Burgos, promesa fallida del PP e íntimo amigo del expresidente de la Generalitat Valenciana.
Comentarios
Joder con el descubrimiento. Como todas las fundaciones
Otra fundación que vive del Estado...? Eso sí es vivir de paguitas...