La exdirectora de una residencia de Tremp (Lleida) donde murieron 64 ancianos en la segunda ola de la pandemia, en 2020, ha rechazado este lunes que tuviera responsabilidades en la crisis sanitaria vivida en el centro, y ha culpado a las monjas que se encargaban de la atención higiénico-sanitaria. La acusada, que ha respondido únicamente a preguntas de su defensa y del juez instructor, se ha exculpado de cualquier responsabilidad, ha afirmado que todo estaba en orden y ha señalado a las religiosas que atendían a los mayores.
Comentarios
la culpa siempre es de otro, y si todo falla, del muerto.
La responsable del centro de la tercera edad ha declarado este lunes que todo estaba en orden, que el geriátrico funcionaba correctamente y que los Mossos d’Esquadra mintieron en su investigación, en la que detectaron múltiples irregularidades. Además, ha indicado que ella es trabajadora social y que, en todo caso, de cualquier deficiencia sanitaria son responsables los sanitarios.
Monjas al cuidado de asilos, orfanatos o sanatorios es siempre una catástrofe humanitaria esperando ser desatada.
Monjitas: no hay una buena.
fuego purificador para todos, que diosito ya reconocerá a los suyos
Pero qué pedazo de barbaridad has dicho...