El destino preferido de los eurodiputados españoles, que se pasan el año tomando vuelos a Bruselas y Estrasburgo es, precisamente, España, donde por su trabajo no pasan el tiempo que les gustaría a ellos y a sus familias. Si durante el año las batallas políticas les separan, en agosto poco importa el partido político; todos están de acuerdo: "como en casa en ningún sitio", que diría Dorothy del Mago de Oz.
Comentarios
pero las dietas no dejan de cobrarlas
Menos los de Podemos, que también.
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