Perdió la batalla por exigir corbata, pero huye de las modas. Ha acometido los cambios necesarios para que todo siga igual. Mas que una renovación, es una adaptación a los nuevos tiempos del restaurante que trasladó de Berlín su abuelo Otto en 1943 aconsejado por los jerarcas nazis Albert Speer y Hermann Goering. En Españaña se convirtió en el centro de espionaje de Hans lazar, un nazi judío de la embajada alemana. Ahora van desde los reyes eméritos hasta jóvenes saturados del 'boom' de las estrella Michelin
Comentarios
@caligula77