Las estafadoras fueron una presunta parasicóloga y una tarotista. La víctima les entregó 10 mil dólares para que se los “curaran”, pero las mujeres desaparecieron. Lo único que quería era que la parasicóloga y la tarotista, de quienes había escuchado por radio, volvieran a unirlo a su pareja, pero en lugar de ello las mujeres lo separaron de sus ahorros: diez mil dólares que el hombre les entregó voluntariamente para que se los “curaran” ante la presunción de que estaban embrujados.
Comentarios
#2 La culpa es de la víctima. Siempre.
Le han librado de un peligroso embrujo y aún se queja. Hay gente que es muy malagradecida. Malagradecida e ignorante (apostillo)
No sólo es que se merece que le hayan robado, sino que además habría que darle una paliza. Por gilipollas.
¡Inspector de billeteras embrujadas!
#2 Como a los compradores de preferentes, de sellos, de pisos sobrevalorados.... En fin...
¿En serio?
Yo no diferencio entre un vidente y una casa de apuestas. Existen porque somos muy idotas.
En todo caso, la videncia ya es una estafa en sí mismo, te roban con tu consentimiento.
Mejor haber llevado ese dinero a exorcizar donde un cura
#6 igualito.
#1 Menos mal que no le percutieron el ano. Además.
#2 seguro que tu eres muy listo, aquí huele a mierda