"Parece un refrito de un libro escrito hace 20 años por Michael Crick sobre el supuesto instrusismo en las filas laboristas", ha dicho Corbyn interrogado sobre el contenido del dossier que su rival ha presentado.
en UK a falta de Venezuela, se les acusa de troskistas o commies infiltrados. Lo que sea para que cualquier atisbo de socialdemocracia real o ideologia progresista no llegue nunca a ningun puesto de poder.
Hay un interes exacerbado de poner un Pdr Snchz a la inglesa al frente de los laboristas
Abundo en lo que comenta koteas: trotskista, antisemita....lo siguiente será satanista o pedófilo. En todas partes cuecen habas los mismos, los que dominan los medios de "comunicación".
Y aunque lo fuera, ¿qué? Están mucho más dispuestos a perdonar que sean unos vendidos a los lobbies armamentísticos,alimentarios, energéticos... a que sean "demasiado" de izquierdas para su fino paladar. Acusar de trotskista les retrata a los acusadores más que a Corbyn.
Comentarios
Cuando se trata de infiltración trotskista el término adecuado es "entrismo"
https://es.wikipedia.org/wiki/Entrismo
¿Troskitas? Eso es lo que decían los estalinistas durante la gran purga.
en UK a falta de Venezuela, se les acusa de troskistas o commies infiltrados. Lo que sea para que cualquier atisbo de socialdemocracia real o ideologia progresista no llegue nunca a ningun puesto de poder.
Hay un interes exacerbado de poner un Pdr Snchz a la inglesa al frente de los laboristas
#2 De venezolanos también eso es comodín a Sanders también se lo dijeron
Abundo en lo que comenta koteas: trotskista, antisemita....lo siguiente será satanista o pedófilo. En todas partes cuecen habas los mismos, los que dominan los medios de "comunicación".
Parece que han tomado nota de la política en España... les falta mentar a ETA y a los separatistas.
Y aunque lo fuera, ¿qué? Están mucho más dispuestos a perdonar que sean unos vendidos a los lobbies armamentísticos,alimentarios, energéticos... a que sean "demasiado" de izquierdas para su fino paladar. Acusar de trotskista les retrata a los acusadores más que a Corbyn.