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#4:
Mi residencia, no es tu casa, ni de lejos. Ni siquiera la residencia en la que vives es tu casa, será tu domicilio, pero tu casa nunca si estás en Madrid.
Os cuento:
Hubo una vez en 2004 en Madrid una residencia en régimen de propiedad y alquiler promovida por el colegio de huérfanos de hacienda, su nombre "las Calendas" situada en la calle Rosalía de Castro.
Constaba de 4 modulos, uno para dependientes y tres más de apartamentos con uno o dos dormitorios en régimen de propiedad o alquiler de los usuarios.
La planta baja contenía todos los servicios que pudieran necesitar desde consulta con un geriatra todas las mañanas, a enfermera a jornada completa y un celador 24 horas.
Tenía, capilla, biblioteca, peluquería, gimnasio, piscina, jardines, centro de sctivifades, charlas y conferencia, cafetería y testaurante, internet y portería, garaje, fontanero, electricista, calefacción común y otros servicios en preparación.
Era un lugar estupendo donde ya muy mayor falleció mi padre y había una pequeña morgue que él estrenó. Luego pasaron por las Calendas mi madre y dos de sus hermanas que vivían juntas pero independientes cada una en su propio apartamento amueblado con sus muebles más queridos.
La residencia era un ejemplo en todo, en construcción, diseño, estatutos, ... un ejemplo que las grandes tenedoras de residencias no se podían permitir y por presiones de todo tipo se reconvirtió en un hotel para estudiantes de oposiciones, ejercicios espirituales, y más tarde para jugadores de golf, expulsando a los inquilinos y residentes, retirando los servicios contratados, médicos, sanitarios, cocineros, peluqueros y personal especializado.
Cierto que distintos directores fueron condenados a prisión por delitos tipificados y algunos inquilinos fueron indemnizados por incumplimiento de contrato y trasladados a otras residencias con estándares de lujo y mierdas de servicio, en las que prácticamente todo el personal rotaba cada seis meses con sus consiguientes carencias ya que en cada rotacion había menos empleados. Y era una residencia de lujo sin servicios de calidad.
Para que todo eso ocurriera hubo varios cómplices necesarios en la administración de la CAM de Esperanza Aguirre.
Sin duda era un modelo de residencia que no podían consentir.
Os cuento:
Hubo una vez en 2004 en Madrid una residencia en régimen de propiedad y alquiler promovida por el colegio de huérfanos de hacienda, su nombre "las Calendas" situada en la calle Rosalía de Castro.
Constaba de 4 modulos, uno para dependientes y tres más de apartamentos con uno o dos dormitorios en régimen de propiedad o alquiler de los usuarios.
La planta baja contenía todos los servicios que pudieran necesitar desde consulta con un geriatra todas las mañanas, a enfermera a jornada completa y un celador 24 horas.
Tenía, capilla, biblioteca, peluquería, gimnasio, piscina, jardines, centro de sctivifades, charlas y conferencia, cafetería y testaurante, internet y portería, garaje, fontanero, electricista, calefacción común y otros servicios en preparación.
Era un lugar estupendo donde ya muy mayor falleció mi padre y había una pequeña morgue que él estrenó. Luego pasaron por las Calendas mi madre y dos de sus hermanas que vivían juntas pero independientes cada una en su propio apartamento amueblado con sus muebles más queridos.
La residencia era un ejemplo en todo, en construcción, diseño, estatutos, ... un ejemplo que las grandes tenedoras de residencias no se podían permitir y por presiones de todo tipo se reconvirtió en un hotel para estudiantes de oposiciones, ejercicios espirituales, y más tarde para jugadores de golf, expulsando a los inquilinos y residentes, retirando los servicios contratados, médicos, sanitarios, cocineros, peluqueros y personal especializado.
Cierto que distintos directores fueron condenados a prisión por delitos tipificados y algunos inquilinos fueron indemnizados por incumplimiento de contrato y trasladados a otras residencias con estándares de lujo y mierdas de servicio, en las que prácticamente todo el personal rotaba cada seis meses con sus consiguientes carencias ya que en cada rotacion había menos empleados. Y era una residencia de lujo sin servicios de calidad.
Para que todo eso ocurriera hubo varios cómplices necesarios en la administración de la CAM de Esperanza Aguirre.
Sin duda era un modelo de residencia que no podían consentir.
Comentarios
Mi residencia, no es tu casa, ni de lejos. Ni siquiera la residencia en la que vives es tu casa, será tu domicilio, pero tu casa nunca si estás en Madrid.
Os cuento:
Hubo una vez en 2004 en Madrid una residencia en régimen de propiedad y alquiler promovida por el colegio de huérfanos de hacienda, su nombre "las Calendas" situada en la calle Rosalía de Castro.
Constaba de 4 modulos, uno para dependientes y tres más de apartamentos con uno o dos dormitorios en régimen de propiedad o alquiler de los usuarios.
La planta baja contenía todos los servicios que pudieran necesitar desde consulta con un geriatra todas las mañanas, a enfermera a jornada completa y un celador 24 horas.
Tenía, capilla, biblioteca, peluquería, gimnasio, piscina, jardines, centro de sctivifades, charlas y conferencia, cafetería y testaurante, internet y portería, garaje, fontanero, electricista, calefacción común y otros servicios en preparación.
Era un lugar estupendo donde ya muy mayor falleció mi padre y había una pequeña morgue que él estrenó. Luego pasaron por las Calendas mi madre y dos de sus hermanas que vivían juntas pero independientes cada una en su propio apartamento amueblado con sus muebles más queridos.
La residencia era un ejemplo en todo, en construcción, diseño, estatutos, ... un ejemplo que las grandes tenedoras de residencias no se podían permitir y por presiones de todo tipo se reconvirtió en un hotel para estudiantes de oposiciones, ejercicios espirituales, y más tarde para jugadores de golf, expulsando a los inquilinos y residentes, retirando los servicios contratados, médicos, sanitarios, cocineros, peluqueros y personal especializado.
Cierto que distintos directores fueron condenados a prisión por delitos tipificados y algunos inquilinos fueron indemnizados por incumplimiento de contrato y trasladados a otras residencias con estándares de lujo y mierdas de servicio, en las que prácticamente todo el personal rotaba cada seis meses con sus consiguientes carencias ya que en cada rotacion había menos empleados. Y era una residencia de lujo sin servicios de calidad.
Para que todo eso ocurriera hubo varios cómplices necesarios en la administración de la CAM de Esperanza Aguirre.
Sin duda era un modelo de residencia que no podían consentir.
#4 Bravo por tu aporte y sobre todo el remate.
Están las residencias de Madrid para tirar cohetes, falta de atención y medios que denuncian familiares, profesionales y sindicatos y no pasa nada.
Se arregla todo con un anuncio guapi.
Es lo que pasa cuando las ovejas votan al lobo.
" y además en Madrid no se paga impuesto de sucesiones"
“De las residencias al cielo”
¿Van a salir ahora todos los tertulianos de Ana Rosa, Pablo Motos, la Griso, Risto, Alsina, Herrera... a hacer una contracampaña y llorar por la cantidad de dinero que se gasta en propaganda mientras sigue sin solucionarse el problema de las residencias?
¿Ahora van a poner en duda que se paguen impuestos porque en vez de para comida digna y condiciones salubres de las residencias, sólo sirven para propaganda y amiguitos?
Lo que está claro es que el comando astroT de MNM sabe que esta noticia es mejor dejarla pasar, ya mejor se meten a comentar una del ministerio de Igualdad.
100k votos más para ayuso por publicitar el matadero de viejos de su comunidad.
Esta claro que no hay justicia en este país, viendo cómo una persona que hizo lo que hizo con la gente en las residencias, puede reírse ahora de esta forma de todo aquello.
#10 Hay que estar perturbado para apoyar a semejante genocida, a la por cierto no le llega su San Martín, al contrario...
Los madrilis están fatal de la cabeza, será la contaminación.
Han hecho bien en cambiar el lema de campaña, esa que tenían en abril de 2020 que decía "mi residencia será mi tumba" no era muy comercial.
A ver, en esto siempre puedes pillar algún sobre...
Llevando al abuelo al hospital o al médico a la residencia lo más que pillas son unas magdalenicas, que es cierto que la gente mayor es muy agradecida, pero el agradecimiento no llena sobres!!!
"27,5 millones de euros a publicidad institucional en doce meses"
Los próximos residentes que se fijen mejor en lo que firman antes de entrar, que luego no los trasladan al hospital cuando agonizan y encima se quejan.
Ya solo falta otro del ministerio de igualdad donde hablen de follar en la tercera edad para demostrar la importancia de pagar impuestos.
#6 Comentario de mierda con
Que lo sepas.