Una institución desprestigiada, una deuda galopante y una obligada austeridad presupuestaria. Esto es lo que heredará el ganador de las próximas elecciones en la Comunidad Valenciana. A pesar de tan escaso premio la carrera por alcanzar el sillón del President de la Generalitat será más encarnizada que nunca puesto que, por primera vez en 20 años, el PP no tiene la victoria asegurada y ningún partido puede permitirse fallar en unos comicios en los que un sólo escaño puede marcar quién se lleva finalmente la llave de la codiciada gobernabilidad
Comentarios
En la ruina ya estamos en Valencia.
El tema real es si queremos seguir gobernados por una panda ladrones que nos ha llevado a esta situación, o cambiamos a otro con al esperanza y pasado un tiempo, salgamos del agujero de mierda donde nos han metido.
Todo esto, sin entrar en temas de justicia, que nuestro gobierno autonómico/nacional, se ha interesado tanto en bloquear, como es la corrupción, delitos de asesinato como el del metro ...