Desde hace bastantes meses, el cielo de Bruselas está cubierto con negros nubarrones, un mal augurio para las serias y tangibles amenazas que se ciernen sobre las instituciones europeas y sobre los miembros de la Unión de corte (hasta el momento) europeísta. Con el paso de los meses, las amenazas potenciales se vuelven ciertas, y sus enemigos exteriores (e interiores) en evidentes.
Y aún así hay quienes defienden sin ningún rubor que la UE no tendría ningún reparo en reducir población y territorio que quiere seguir perteneciendo a la UE, como podría ser el caso de una posible Cataluña independiente.
Comentarios
"puede", "sería"...
Y aún así hay quienes defienden sin ningún rubor que la UE no tendría ningún reparo en reducir población y territorio que quiere seguir perteneciendo a la UE, como podría ser el caso de una posible Cataluña independiente.
Ojala sea verdad.............
Pero no era España la que se rompía?
Cómo gustan las noticias metemiedos.