Jugada a la desesperada del Gobierno para evitar que el conflicto del taxi le estalle (aún más) en las manos. El Consejo de Ministros se prepara para aprobar un proyecto de real decreto-ley para establecer las condiciones que regulan la actividad de alquiler de coches con licencias VTC de Uber y Cabify. No es una normativa cualquiera. Llega justo cuando el Tribunal Supremo se dispone a emitir la sentencia en el caso que enfrenta a la CNMC y a Fomento para liberalizar el sector. Se espera que el alto tribunal dé la razón a la CNMC.
Comentarios
En mi opinión, empresas con sede fiscal en Irlanda o en Delaware pueden pedir lo que quieran. Pueden pedir que se liebralice el sector, descuentos en gasolina o que lluevan ranas.
No, no, no y no.
Pagad y luego pedid.
#2 Eso es cojonudo cuando el taxi lleva siendo protegido desde hace décadas y ha tenido el monopolio desde hace esas mismas décadas, (hasta en los aeropuertos). Así también pido yo cosas. Cuando el árbitro te da diez goles de ventaja y no dejas ni meter al equipo contrario el gol de consolación.
Esto es lo mismo que la SGAE que pide leyes justas para Internet, porque la realidad es que sus socios/as no saben hacer la o con un canuto desde que apareció Internet.
Salu2
No sé por qué hay que dar beneficios a empresas con sedes en paraísos fiscales en detrimento de personas que tributan aquí. Que el taxi haya que reformarlo no hace buenos, necesariamente, a Uber y Cabify.
Y este es el modo, queridos amigüitos, en el que se hacen las cosas por el cortijo Egpañol.
#3 100.000 pymes no son en mi opinión un cortijo.
Que gente buscando una manera de ganarse la vida aceptase las reglas del juego para que a mitad de partido se cambien al gusto del capital me parece una estafa bochornosa.
El PP o ultraconservadores católicos tienen de liberales nada o menos...
#1 el PP con el apoyo de C´uñagramo$ ,
siempre contra los trabajadores y
emPPobreciendo mas y mas a la ciudadania :
es el caPPitalismo amigüos !
El sector taxi mercadeando durante años con licencias públicas, vendiéndolas a precios desorbitados es el verdadero problema del taxi en España, como el de las farmacias.
No es de recibo que una licencia administrativa se compre y se venda sin control alguno por cientos de miles de euros para dar un Servicio Público.
Al Supremo no lo respeta ni el goierno del PP.