Hace 6 años | Por --526496-- a eldiario.es
Publicado hace 6 años por --526496-- a eldiario.es

Hace unos meses, asistí a una conferencia. En el programa, sólo una mujer. En una conferencia económica eso suele ser raro –por exceso–. La mujer en cuestión era una reputada economista, casada con otro reputado economista. Ambos presentaron artículos, escritos conjuntamente. La presentación de ella fue interesante, amena, dinámica y pedagógica, muy superior a la de él, aburrida y excesivamente técnica. Las interrupciones en la presentación de ella fueron constantes, condescendientes, hostiles. En las de él eran cómplices, mostraban interés.

Comentarios

D

Que no pare el victimismo, a tope.

MeinKampf

Si no hay mujeres, malo, si hay mujeres, malo tambien