Publicado hace 4 años por macarcur a elperiodicoextremadura.com

Es corriente que los partidos políticos busquen puntos de desacuerdo en torno a los que reafirmarse y pregonar su (a veces escasa) mercancía ideológica. Algo para lo cual la educación es terreno siempre fértil. De ahí que la comunidad educativa tengamos este síndrome de punching ball de feria en el que unos y otros exhiben, en cuanto tocan poder, sus sacrosantas diferencias.