Hace 6 años | Por jelzimoñac a publico.es
Publicado hace 6 años por jelzimoñac a publico.es

Como si de un mercado se tratase, los hombres del pueblo harán sus ofertas para poder disfrutar de un baile con alguna de sus vecinas. El mismo alcalde ponía el ejemplo con su propia mujer hace unos días: “Alguien puede decir que quiere pagar diez euros para que la señora del alcalde baile con otra persona. Entonces el alcalde [él mismo], que está un poco mosqueado, dice que cómo va a bailar su mujer con esa persona. 15 euros”, asegura subiendo así la apuesta.

Comentarios

Tachy

Hay que mantener la tradición, que si no las mujeres se extinguirían.

D

Y después de la puja viene la bajada... de bragas.