El insecto estaba alimentándose de las lágrimas del anolis, un comportamiento conocido como lacrifagia, y que en general practican animales con probóscide (un apéndice alargado y tubular situado en la cabeza de ciertos insectos) como polillas y mariposas, e incluso abejas, para completar su dieta de sales y otros nutrientes a través de las secreciones de tortugas, cocodrilos, lagartos o aves.
Comentarios
Cucaracha pero exquisita.
¿y lágrimas de lagarta?
Hasta que no coma lagrimas de facha me la suda...
Cucaracha: «Tu sufrimiento me alimenta»