Publicado hace 11 años por Gregofernandez a gregoriojfernandez.com

Cuesta encontrar espacios abiertos a la aventura como éste. Excusas para naufragar en islas desiertas y —pese a haber leído ya bastante sobre naufragios— descubrir allí un páramo libre a la imaginación, el terror, la fantasía y una visión crítica de lo que dejamos tras todo un océano. En esa sorpresa, camina el lector al pasar la última página de ‘La piel fría’, de Albert Sánchez Piñol. Una novela que, casi una década después de su publicación, sigue demostrando la positiva respuesta de quien disfruta de la simplicidad de un libro bien narrado.

Comentarios

D

#0 No está mal, pero si varías tus fuentes, probablemente alguna vez se te vote positivo.
@gregofernandez