Como sigan estos fríos y, sobre todo, se perpetúen en nuestro calendario, voy a pedir asilo climático en un país tropical. Nunca antes, como en estos dos últimos días, me he sentido tan próxima a las aves migratorias. Tanto que estoy pensando irme con ellas. Si no fuera porque tengo un cierto miedo a las alturas,...
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un relato ameno