La cantidad de enemigos era implacable, rodearon a Napoleón y sus hombres, y finalmente lo hicieron claudicar. En su desesperación, se retirarían. ¿Waterloo?, no exactamente. La derrota más memorable y humillante de Napoleón llegó a manos, bueno, las patas de una temible banda de conejos.
Comentarios
Aviso a despistados: se refiere a los conejos esos que tienen las orejas largas.
#1 Todos los conejos tienen las orejas largas y los labios cortos.
Que a veces parecéis nuevos.