Hace 2 años | Por --662085-- a es.euronews.com
Publicado hace 2 años por --662085-- a es.euronews.com

La primera vez que se reunió el Grupo Helsinki, recién creado por la Comisión Europea, no todos tenían claro qué estaban haciendo allí. De hecho, había muchos escépticos que se negaban a ver el problema. Era 1999 y Europa sospechaba que existía una brecha de género en el campo de la ciencia. Faltaban mujeres en puestos de responsabilidad científica y se veían más hombres dedicándose a la investigación, pero no había datos para corroborar esta realidad que se palpaba en los laboratorios. Y, sin estos datos, no se podía actuar.

Comentarios

oso_69

He leído -un poco por encima, lo admito- el artículo y no he visto ninguna explicación de "la brecha de género". Habla de números y estadísticas, pero no da ni una sola razón, que yo haya visto, de por qué hay más hombres dirigiendo equipos o investigando que mujeres.

oliver7

#1 lo de siempre. lol

m

Era 1999 y Europa sospechaba que existía una brecha de género en el campo de la ciencia. Faltaban mujeres...

Montan comisiones y cosas cuando ven que hay menos mujeres que hombres. Sin embargo, cuando hay más mujeres que hombres nadie hace nada. Esto indica que el tema de mujeres y hombres no es la razón real, no es más que una excusa. Las razones detrás de estos movimientos son políticas. Interesa fomentar el feminismo, porque el feminismo es útil.

“La cuestión de género llegó a los políticos para que fuesen conscientes de la importancia de incluir y mantener a las mujeres en la ciencia”

El artículo no dice absolutamente nada sobre la importancia de esto. Es algo que el lector debe imaginarse por su cuenta. Yo creo que el objetivo es precisamente este, el decir que es muy muy importante, pero sin decir el porqué, muy probablemente porque no hay porqué.

L

#3 No sé si te has dado cuenta de que las posiciones en las que hay más mujeres son las menos prestigiosas y peor retribuidas de cada campo. Y que los obstáculos para acceder a posiciones mejor retribuidas o de más prestigio tienen que ver con sesgos sociales heredados o con prejuicios y realidades respecto a la maternidad y la estructura social heredada.

Para dirigir un equipo de investigación es muy probable que se tenga en cuenta si eres madre o pudieras serlo. Para un trabajo de limpiadora a nadie le parece un problema. Y si comparas con trabajos precarios masculinizados (camionero, por ejemplo), en la mayoría de los casos verás una brecha salarial respecto a trabajos precarios feminizados (limpiadora).

Las mujeres tienen el privilegio de acceder a la educación superior desde hace no tanto si consideramos la historia. No pretendamos hacer ver que los precedentes no influencian nuestra realidad social replicándola. El ser humano aprende por imitación y las perspectivas de vida se ven coartadas por nuestra tendencia a replicar la realidad que conocemos. De ahí el esfuerzo activo por cambiarla.

m

#4 No sé si te has dado cuenta de que las posiciones en las que hay más mujeres son las menos prestigiosas y peor retribuidas de cada campo.

Es totalmente cierto, ¿pero eso es la causa o la consecuencia? Examinemos los hechos. En Rusia, antes, los médicos eran hombres. Era una profesión de prestigio (врач, nada menos). Las mujeres empezaron a meterse a médicos, como en todas partes, pero bastante antes que por aquí (el sistema comunista lo alentaba). Ahora casi todos los médicos son mujeres, apenas hay hombres. Ya no tiene el prestigio que tenía. Los sueldos han bajado.

El ser humano aprende por imitación

Sí, sí, puede ser, pero eso no es muy relevante. Dejémos a un lado las circunstancias y vayamos a lo esencial. Hemos visto más arriba que el que una función sea realizada por hombres o por mujeres infuye en su prestigio. La pregunta relevante es: ¿qué causa esa diferencia?. La respuesta es nuestro comportamiento.

Pero si esto fuera por imitación, imitaríamos el prestigio que tiene un врач y lo aplicariamos a las primeras mujeres que se dedicaron a matasanos. Es incluso posible que eso fuera lo que realmente sucedió, pero cuando se convierte en algo masivo, algo cambia ahí. Ya no es lo mismo. Otra cosa interviene y cambia nuestra percepción.

No nos comportamos imitando. No nos comportamos según se nos enseña o todos seríamos unos santitos. Nuestro comportamiento está heredado biológicamente. Esto de asignar prestigio según el sexo asociado a una función tiene todas la pinta de ir por ahí, no es algo que se vaya a poder cambiar.

Me parece injusto, desde luego, pero decir "patriarcado" no sirve de nada (aparte de ser una gilipollez). Primero hay que saber con qué estás tratando, aceptar la realidad. Estás tratando con nuestros instintos.