Quisiera iniciar este artículo con una frase de Lykken: "Una de las razones por las que el psicópata primario es una mala apuesta terapéutica es que carece de la motivación necesaria; los que sufren las consecuencias de su afección son sus familiares y conocidos, no el propio psicópata". Creo que a partir de esta frase se ha instaurado un nuevo axioma en la forma de comprender y asumir las relaciones terapéuticas con la persona con trastorno antisocial de personalidad.
Comentarios
Si.
Y al que no me crea que venga a mi casa... muahhahahhahahahah.