Hace 2 años | Por luiggi a milenio.com
Publicado hace 2 años por luiggi a milenio.com

José Eduardo Ravelo Echeverría, El Güero, de 23 años, fue presuntamente asesinado y abusado sexualmente por elementos de la Policía Municipal de Mérida, Yucatán, el pasado 21 de julio de 2021.

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Es horrible, secuestro, violación y asesinato Espero que detengan a esos policías miserables y les caiga la condena máxima

luiggi

En el penúltimo video proporcionado por el ayuntamiento, justo tras la liberación de 4 policías detenidos, parecen correcta la actuación policial y revictimiza al muchacho asesinado.
El problema (para las autoridades) es que al poco rato filtraron otros vídeos donde se ve que tardaron una hora en llegar a la comisaría que estaba a diez minutos.
Qué lo bajan arrastrando y lo dejan tirado en el suelo afuera en el aparcamiento, junto a la puerta a la comisaría durante 40 minutos y de vez en cuando le clavan las rodillas en las costillas.
Se ve también como lo meten en la celda inconsciente y sin pantalones.
Cuándo lo sacan de presión se aleja cojeando.
El alcalde ha defendido la inocencia de sus policías y ha asegurado colaborar con la fiscalía, a la que se ha negado proporcionar los vídeos que graban las 24 horas alegando que a la semana se borran. Lo extraño es que si proporcionó fracciones donde la actuación de la policía local parece correcta.
El chico al salir le avisó a su madre de la detención, paliza y violación. La madre, de condicion humilde, logro dinero para viajar a Mérida, Yucatán.
Por lo mal que se encontraba el muchacho lo llevó a un hospital. Diciéndole al doctor que había sido violado por los policías. El doctor no le creyó y le dijo que "no sería que es gay!" Y le exigió un diagnóstico médico para atenderle.
Así que, cómo no tenían recursos, decidieron ir al médico de la fiscalía, donde comprobaron los golpes y la violación y le atendieron la denuncia.
Con este informe médico ya si le atendieron en el hospital. Pero fue tarde y murió.
Las autoridades ignoraron a la madre. Así que decidió llevar su féretro delante del palacio de gobierno estatal. Intentaron quitarla, pero legalmente no pudieron, así que con la escalada mediática el gobernador del estado la recibió y le prometió justicia.
Sin embargo la actuación de la fiscalía estatal ha sido muy tibia, sin intervenir para conseguir las pruebas, limitándose a solicitarlas a la propia policía local, la cual solo le proporcionó lo que le interesó para aparentar normalidad. Con lo que a los pocos días los 4 policías detenidos por las fuerzas estatales (para aparentar contundencia) fueron liberados por el juez, el cual reconoció los hechos pero no consideró probada la culpabilidad. A su favor decir que los últimos vídeos donde está registrado el maltrato aún no se había filtrado.
Ante esto la familia decidió pedir audiencia al presidente de México. Quién se adelantó y realizó denuncia ante la comisión de derechos humanos quienes si tendrían competencia para investigar un caso que en principio debería tener investigación estatal. Asegurando que también serán castigadas las autoridades que hayan podido encubrir a los culpables. Y ahí estamos.