Con solo 6 años, Anabelle atravesó un infierno. Vivía en la pobreza extrema, su madre la vendió a la mafia, quienes la explotaron aprovechándose de que padecía una rara enfermedad genética, el Síndrome de Crouzon. La historia de una nena que jamás se rindió y hoy tiene una vida plena
Y es por cosas así por lo que nunca, nunca, aunque suene espantoso y nos parta el corazón, hay que dar limosna nunca a nadie. La limosna perpetúa estas situaciones y contribuye a la mutilación, sufrimiento y tráfico de seres humanos, sobre todo de niños.
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Y es por cosas así por lo que nunca, nunca, aunque suene espantoso y nos parta el corazón, hay que dar limosna nunca a nadie. La limosna perpetúa estas situaciones y contribuye a la mutilación, sufrimiento y tráfico de seres humanos, sobre todo de niños.
La gente de Bart
#1 me has quitado las palabras