Hace 13 años | Por ndrpst a elpais.com
Publicado hace 13 años por ndrpst a elpais.com

Si usted disfruta como un enano zampándose un pastelito prefabricado, una hamburguesa de McDonald's o un paquete de Doritos, relájese: entregarse de vez en cuando a la comida más incorrecta no significa ser un zote gastronómico con el paladar maleducado. Los grandes cocineros, esos señores que se pasan cada día probando las más altas exquisiteces culinarias, también lo hacen. Y gozan con parecidas guarrerías o, si quieren llamarlas de forma elegante, "placeres culpables" que todos nosotros.