Estas corrientes suelen venderse como un producto aparentemente inofensivo presentado bajo capa de crecimiento personal. Un producto que, sin embargo, oculta contraproducentes dictaduras afectivas asociadas al más despiadado neoliberalismo, que se apropia emocionalmente de los individuos y los transforma en sujetos del rendimiento en total connivencia con las grandes corporaciones mundiales.
El otro día pensé en algo parecido.
En política y más actualmente veo a los fascistas llamando rebaño a la izquierda y viceversa.
Y de la derecha me sorprende que usen ese término, rebaño, refiriéndose a la alienación (descrita por Marx) ellos piensan que la gente de izquierdas está ciega que no ve la supuesta "opresión" que representan las políticas del pie que cojean.
En la izquierda pasa algo parecido pero con porcentajes muy altos de personas que intuyen por donde van las cosas pero se leyeron un panfeltin y se creen visionarios de las libertades (con discursos bastante pochos)
Y pienso que hay muchas personas adormecidas y no saben por dónde les da el viento. En parte por lo que describe el artículo que no deja de ser una reflexión sobre la individualidad y la meritocracia (yo me lo guiso, yo me lo como. Lo bueno y lo malo)
Y esto donde me deja? Soy yo la visionaria que ve el percal? Soy la única con la verdad?
No, no me quiero tanto para afirmar semejante cosa (hay muchas personas con la virtud del pensamiento crítico. Conozco a bastantes en persona y algunas las encuentro en meneame por ejemplo. Hay muchos músicos que también tienen la virtud)
Y mi conclusión es que son esas personas las que merecen la pena y todas más o menos tenemos el mismo estilo de vida y la misma forma de ver el mundo. Así que no creo en la individualidad, pero si en los grupos pequeños. Afines. La felicidad no es una meta alcanzable (saber que jamás podré tocar el horizonte es felicidad: escrito por mi) esos momentos compartidos con pequeñas tribus, en la que nos entendemos, en las que nos cuidamos. Reímos y lloramos. Eso no es meritocracia. Es solidaridad, amor, compañerismo y es la única forma de conseguir caminar hacia el horizonte...
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El otro día pensé en algo parecido.
En política y más actualmente veo a los fascistas llamando rebaño a la izquierda y viceversa.
Y de la derecha me sorprende que usen ese término, rebaño, refiriéndose a la alienación (descrita por Marx) ellos piensan que la gente de izquierdas está ciega que no ve la supuesta "opresión" que representan las políticas del pie que cojean.
En la izquierda pasa algo parecido pero con porcentajes muy altos de personas que intuyen por donde van las cosas pero se leyeron un panfeltin y se creen visionarios de las libertades (con discursos bastante pochos)
Y pienso que hay muchas personas adormecidas y no saben por dónde les da el viento. En parte por lo que describe el artículo que no deja de ser una reflexión sobre la individualidad y la meritocracia (yo me lo guiso, yo me lo como. Lo bueno y lo malo)
Y esto donde me deja? Soy yo la visionaria que ve el percal? Soy la única con la verdad?
No, no me quiero tanto para afirmar semejante cosa (hay muchas personas con la virtud del pensamiento crítico. Conozco a bastantes en persona y algunas las encuentro en meneame por ejemplo. Hay muchos músicos que también tienen la virtud)
Y mi conclusión es que son esas personas las que merecen la pena y todas más o menos tenemos el mismo estilo de vida y la misma forma de ver el mundo. Así que no creo en la individualidad, pero si en los grupos pequeños. Afines. La felicidad no es una meta alcanzable (saber que jamás podré tocar el horizonte es felicidad: escrito por mi) esos momentos compartidos con pequeñas tribus, en la que nos entendemos, en las que nos cuidamos. Reímos y lloramos. Eso no es meritocracia. Es solidaridad, amor, compañerismo y es la única forma de conseguir caminar hacia el horizonte...
No lo dudes, enredanlas leyes con tanto pensamiento memo y muchas veces perjudicial.
#1 redes sociales quería decir.