Una confusión en la entrega de los cadáveres de dos varones a sus respectivas familias en Vigo ha provocado que uno de ellos, el de un ciudadano portugués que murió en un accidente laboral en Tui, fuera incinerado por error. El Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga), a través de fuentes de la Xunta de Galicia, se desvincula de este error y culpa a la funeraria por no comprobar la identidad del cuerpo que recogió del hospital Nicolás Peña para entregárselo en el tanatorio a la familia equivocada.
Comentarios
¿La Xunta se lava las manos? Qué raro,¿no?
Pues espero que les tengan que pagar bastante.
Con el timo que es morirse....
Yo de verdad, que me tiren a una cuneta pero que no se gasten un duro en gilipolleces.
El problema es tener conformes a las dos familias, si los dos querían incineración no problema, ahora una si y otra no; manzanas traigo.
#3 ¿Cómo que no problema? Si el cadáver estaba "presentable" no se pudieron "despedir", hacer una ceremonia, estar presentes en la cremación...
bueno, mientras el incinerado estuviera muerto es un mal menor...