Su rutina de opositor comienza a las siete de la mañana con varias horas de ejercicio, pues parte de los exámenes de esta oposición incluyen pruebas físicas bastante duras (una de dominadas, otra de resistencia y un circuito de habilidad). Sobre las 11 de la mañana comienza con la teoría –tres horas antes de comer y cinco más después. «Siempre estudio en casa. De hecho, tengo la pared de mi cuarto empapelada de resúmenes y esquemas en formato A3. Uno del organigrama de la DGT con todas las comisarías generales...
Comentarios
Desde los que estudian en solitario hasta los que lo hacen con un coatch pasando por las academias, etc, etc. Los métodos de estudio, las rutinas, las pruebas... la vida en los últimos ( o en los próximos ) años de los opositores.
Me ha recordado los personajes que estudiaban " notarías " en el cine de los 60 en Madrid
Igualito que las pruebas que pasaron hace 10-20 años los actuales funcionarios.
#2 pues no veo tanta diferencia
Ui, con lo mal vistos que están los funcionarios por aquí... a ver quien se tira varios años estudiando 8 horas al día sin ninguna garantía de que te salga bien la inversión de tiempo y dinero (los preparadores no son especialmente baratos).
#3 Huy pues creo haber leido hoy en MñM que somos el país que más plazas de empleo público convoca en la UE...
Si estudas con la tecnica correcta ocho horas al día, seis dias a la semana, y no se trata de las oposiciones más dificiles, no es que no tengas ninguna garantía, es que es absolutamente inevitable que apruebes, te certificas el aprobado. Del mismo modo que quien no oposita, alcanzada cierta edad, se certifica el despido, que tendrá lugar para contratar a otro con más joven, mas barato, o mas manejable. Saludos.
¿Os cuento un secreto? Los funcionarios repetimos eso de las ocho horas al día para que no nos lapidéis por vagos y parásitos. La verdad es que ni de coña. Pensad que para estudiar de verdad ocho horas al día hay que tener una mente muy muy poderosa... una mente que no necesita ocho horas diarias para aprobar ninguna oposición. Bueno, quizá las de jueces, notarios...