Con doce días de torturas sistemáticas en el cuerpo, pero la "dignidad intacta". Así abandonó en 1971 José María Galante, alias 'Chato', la siniestra Dirección General de Seguridad, sede de la Brigada Político Social en Madrid, como se llamaba entonces a la policía política del franquismo. Salió rumbo a la cárcel de Carabanchel acusado de asociación ilícita, propaganda ilegal e insultos a las fuerzas de orden público. No podia sentarse por los golpes en glúteos y genitales, orinaba sangre y casi no podía andar del dolor en los pies.
Comentarios
Y todo bajo la atenta supervisión de jesucristo. Gracias otra vez a Paca la culona y su eterna victoria. Recordad a los votantes del PP toda esta mierda.
#3 Ya lo recordarán pronto, Gallardón está deseando que esto vuelva.
#3 #4 #5 seguramente lo recuerden a diario y se masturben pensando en ello
#3 Si se lo recuerdas te vendrán con lo de no abrir viejas heridas ni remover el pasado.
No hay como dedicarse a aquello que a uno le gusta para ser feliz aunque la sociedad no comprenda tu pasión.
Como la mayoría polis fascistas.
#1 te sobra lo de "fascistas"
Compulsivo no es la palabra adecuada, psicopata sl que lo es. Es importante emplear las palabras apropiadamente.
#6 O mejor "Era un hijo puta compulsivo, disfrutaba con ello"
#9 Yo dejaria "hijo puta" y eliminaria "compulsivo" porque este ultimo termino significa que el individuo al que se le aplica no puede controlar sus impulsos, y el hijo puta de "Billy el Niño" podia controlar perfectamente sus deseos de torturar, pero él no deseaba hacerlo pues es un psicopata sadico.
Es un maldito asesino que no debería estar vivo.