Existen incontables versiones de dibujos del cerebro de un hombre y una mujer. La neurocientífica Daphna Joel muestra uno donde el cerebro masculino tiene dos áreas: "agresión" y "sexo", mientras que el de la mujer marca otras dos: "emoción" y "comunicación". "Explica por qué las mujeres son más sensibles y emocionales, y los hombres más agresivos y sexuales". Durante siglos, la ciencia incluso ha respaldado estas nociones populares, Y sin embargo, asegura Joel, no existe un cerebro masculino y uno femenino. El cerebro es intersexual.
Comentarios
a ver que tenemos unas cosas de lerdos puros.
El cerebro será todo lo intersexual que te de la gana, La piscina de hormonas, químicos y demases que es el cuerpo humano, varían brutalmente de un sexo a otro. Pensar que la química no afecta a nuestra personalidad, cuando la alegría o la tristeza son simplemente química en el cerebro es de facepalm.
Ademas, creo que esta bastante probado que la falta o saturacion de ciertas hormonas afectan y mucho a cosas como la agresividad o la emotividad.
No se, sin ser biólogo todo esto es bastante básico.
Vendo Opel Corsa. Unisex.
"Es que sus investigaciones no tienen implicaciones exclusivamente neurocientíficas, sino también políticas." Ya sabemos que tan serio se pueden tomar sus afirmaciones
Hoy en Izquierda posmo, la biología mola, hasta que nos diga que nos equiocamos, Entonces no mola.
El cerebro es intersexual, ya que tiene características de ambos sexos, cierto. Pero en las mujeres predomina la feminización del cerebro y en hombres la masculinización.
El mío pansesual como mínimo.
Pues mi cerebro es masculino, muy masculino.
Ah, que se refieren al de la cabeza.
¿Y los cojones?
#4 es el DIN.
#4 "Puedes hablar sobre las diferencias entre los genitales masculinos y femeninos —dice—, pero este concepto no tiene ningún significado cuando hablas sobre el cerebro, porque solo por saber la categoría sexual de dos personas, no puedes inferir de antemano en qué sentido sus cerebros serán similares y en qué sentido, distintos".
A ver como lo digo... ¡Y una mierda!
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