Publicado hace 4 años por NubisMusic a elespejogotico.blogspot.com

Hay lugares que determinan nuestra actitud. Uno puede estar en una iglesia, ocasionalmente, incluso sin ningún interés en la religión, sino más bien para cumplir con compromisos protocolares, y sentir que el silencio y el respeto, aunque sean fingidos, se imponen.

Algo similar, pero de un modo inverso, ocurre en los sitios festivos. Uno asume una predisposición a la alegría, que puede o no ser engañosa, pero que finalmente se va apoderando de nuestro estado de ánimo hasta que se vuelve real.