¿Te imaginas que tu casero no hable con nadie, no haga reuniones secretas… y aun así el alquiler suba a la vez que el de todo tu barrio? Eso es, más o menos, lo que pasa cuando muchos propietarios usan el mismo software para fijar precios. El programa aprendía del mercado, comparaba datos y sugería rentas “óptimas”. El resultado era que todos acababan pidiendo más. Así es el “Idealista” de EEUU orientado al alquiler. California ha decidido cortar por lo sano: ha prohibido esta práctica y ha dejado claro que, si un algoritmo sirve para coordina