Para los niños y adolescentes de hoy la frontera entre el aprendizaje formal y el consumo de medios se ha diluido: plataformas como TikTok, YouTube e Instagram no son meros pasatiempos, sino espacios primordiales de socialización, construcción de identidad y acceso a información. Esta “dieta mediática juvenil”, compuesta por vídeos virales, memes, trends y noticias fragmentadas, es la principal matriz cultural de las nuevas generaciones. ¿Cómo debe afrontarla la escuela? Ignorar o rechazar estos contenidos, por considerarlos distracciones.