En la España de los años cincuenta, un joven de buena familia y ex alumno del colegio del Pilar de Madrid, se llevó por delante a cuatro personas a tiro limpio. La prensa de la época lo calificó como «el crimen del siglo», cuando era la españolidad lo que estaba en tela de juicio.(..) Cerca de las diez de la noche, José María Jarabo se presenta en el domicilio del prestamista Emilio Fernández, en el número 57 de la calle Lope de Rueda, decidido a cobrarse «una deuda de honor». Concretamente el anillo de oro y brillantes de su amante extranjera.