Hace 3 años | Por ElLocoDelMolino a lavanguardia.com
Publicado hace 3 años por ElLocoDelMolino a lavanguardia.com

El depósito de cadáveres de la capital francesa se convirtió en una gran atracción en el siglo XIX, con miles de visitas diarias. Los cadáveres se mostraban en vitrinas de cristal de diferentes estancias, desnudos salvo por un taparrabos de cuero, con la multitud apiñada –algunos días llegaron a congregarse allí hasta 40.000 personas, era más visitada que la misma Notre Dame. Antes el aumento de la población de París la idea era mostrar los cadáveres no identificados a la espera de que alguien los reconociese. Pero pronto se llenó de curiosos.

Comentarios

ElLocoDelMolino

"Un propósito loable, decimos, pero que pronto se convertiría en algo no buscado: un museo de la muerte, con su público y su multitud de vendedores de refrescos, comida y recuerdos en el exterior'

es que las morgues dan hambre