Publicado hace 2 años por salemslot a olivermayorga.substack.com

El asesinato de su amante, Johnny Stompanato, a manos de su propia hija, sumó otra desgracia a la desdichada vida de Lana Turner. Para Cheryl, todo terminó con una condena por homicidio justificado y la protección del tribunal, que la puso bajo la custodia temporal de su abuela, Mildred Turner, durante dos meses. Las autoridades policiales del condado de Los Ángeles acudieron a la residencia de la actriz la noche del 4 de abril y allí encontraron a Lana, histérica y llorosa, gritando: «¡Yo tengo la culpa de todo! ¡Yo soy la culpable!».