Qué duda cabe de que leer un libro es una actividad netamente beneficiosa para nuestro cerebro (aunque la mayoría de los libros que se lean no difieran mucho de una revista del corazón o la etiqueta del champú). Sin embargo, se olvidan con frecuencia las enormes ventajas cognitivas (algunas superiores a las que proporciona la lectura) que experimentamos cuando jugamos a videojuegos, como si de repente hubiéramos ingerido alguna droga nootrópica.
Comentarios
Pues cuando aprenderán a escribir frases correctamente.
Y entonces, para que la población aproveche sus enormes ventajas, se enseñará jugar videojuegos en la escuela. Y como consecuencia de ello, las compañías que los publican quebrarán, porque todo el mundo odiará tanto a los videojuegos como a las matemáticas (además de que serán muy malos en ello).
Pues cuando la velocidad será tan impotante como el tocino.
Gamificar es transformar un anuncio de publicidad en un juego, una herramienta de marketing como lo pueda ser una señora estupenda sosteniendo el producto.
#4 #5 Sugiero «ludificar» —por llevarle la contraria a lo sajón.
Nethack es Hamlet. Dwarf Fortress es Ulises de Joyce. Y las videoconsolas pseudo-nextgen son como Crepúsculo.
Transformar en un juego una lección recibe el nombre de gamificación.