Publicado hace 2 años por Ramón_Casadó_Sampedro a todociencia.net

En muchas ocasiones, un viaje puede cambiarte la vida, como le sucedió a la investigadora y neurocientífica Laura Cuaya, de origen mexicano. Concretamente viajó a Hungría con la intención de realizar su trabajo postdoctoral en el Laboratorio de Neuroetología de la Comunicación del Departamento de Etología de la Universidad Eötvös Loránd. Iba acompañada de su perro Kun – kun que, hasta entonces, sólo había escuchado el idioma español.