Hace 1 año | Por Janssen a laverdad.es
Publicado hace 1 año por Janssen a laverdad.es

Básicamente, se trata de una adaptación al clima. Al margen de para respirar, las fosas nasales sirven también para calentar y humedecer el aire antes de que llegue a los pulmones. Una gran cavidad nasal (como la que lucen buena parte de los europeos) sería entonces una ventaja en climas fríos, pero no aportaría ventaja alguna en las zonas más cálidas. Esto no es ninguna novedad. Lo descubrió el antropólogo y anatomista británico Arthur Thomson hace 150 años.