Cuentan que en una institución especializada en niños autistas, en Inglaterra, encontraron que una de las internas, de 14 años, estaba especialmente inquieta. Pensaron que podía ser cosa de la edad, o quizás hormonal, y la hormonaron. En otros tiempos le hubieran dado bromuro o una ducha fría. Algo hemos mejorado.
Seguía inquieta.
Tras muchos exámenes, le dieron ansiolíticos, y su situación mejoró ligeramente, pero no llegó a corregirse del todo.
El problema no llegó a solucionarse hasta que, varios meses después, alguien descubrió que tenía una piedra en uno de los zapatos que le ponían a diario.
Así funcionan las cosas.
Sedados. James Davies
Comentarios
Es demencial el uso indiscriminado que se da de los fármacos a problemas conductuales y vitales. Es una aberración, mezcolanza de supina ignorancia e intereses farmacéuticos y del propio campo de muchos psicoterapeutas. Lo peor es que ya ha calado en el imaginario colectivo (si me permitís el recurso metafórico) que los problemas conductuales son debidos a desequilibrios de neurotransmisores en el cerebro. Parte de la culpa se debe a las "científicas" publicaciones en revistas y medios de divulgación, pero la gran responsable es la deriva acientífica de la propia psicología, de gran parte de sus "escuelas" (fijaros que aquí el apelativo de escuelas no hace referencia a distintas interpretaciones o ramas de una misma ciencia -cómo puede ser física de partículas, teórica, termodinámica...- sino a distintos objetos de estudio con distintos postulados filosóficos antagónicos: monismo y dualismo (enmascarado en muchos casos), determinismo e indeterminismo) que conlleva a consecuencias prácticas dañinas y muy peligrosas. La de sufrimiento que se perpetua debido a malas praxis producto de errores teóricos.
Una enfermedad biológica debe tratarse, es decir, erradicar las causas de la enfermedad. Eliminar los síntomas sin eliminar la causa no es eliminar la enfermedad. Dejando de lado los problemas conceptuales, y las aplicaciones derivadas, de "enfermedad o trastorno mental" (podemos tratar el tema que da para rato), se deduce que la eliminación de síntomas mediante farmacología no solventa las causas del problema.
No he leído este libro en concreto, lo tengo pendiente, pero me he leído a Marino Pérez y los clásicos de Thomas Szasz tocantes al tema. Te pregunto, ¿vale la pena este libro?
#1 El libro estaría bein si la traductora no hubiese traducido el ingles a lenguaje inclusivo en muchas partes.
Es insufrible.
#3 Me lo apunto (en inglés).
#5 Tiene mucho enfoque político, en el sentido de que trata la reacción de lso sistemas de salud ante las enfermedades mentales, peor me pareció interesante.
#1 ¿Qué opinas de las flores de bach? (Es una pregunta trampa)
#4 https://es.wikipedia.org/wiki/Flores_de_Bach
Magufada de cojones.
#6 Lo sé, lo sé. Era para ver si el que tanto crítica a la ciencia es también crítico con la pseudociencia o si realmente es un magufo soltando su perorata. Ahora ya me has descubierto el pastel
#8 Creo que no leíste bien el mensaje o, quizás, me falta claridad en mi exposición, pues no hay en él crítica ninguna a la ciencia, sino una alabanza a ella.
"Lo peor es que ya ha calado en el imaginario colectivo (si me permitís el recurso metafórico) que los problemas conductuales son debidos a desequilibrios de neurotransmisores en el cerebro. Parte de la culpa se debe a las "científicas" publicaciones en revistas y medios de divulgación, pero la gran responsable es la deriva acientífica de la propia psicología, de gran parte de sus "escuelas" (fijaros que aquí el apelativo de escuelas no hace referencia a distintas interpretaciones o ramas de una misma ciencia -cómo puede ser física de partículas, teórica, termodinámica...- sino a distintos objetos de estudio con distintos postulados filosóficos antagónicos: monismo y dualismo (enmascarado en muchos casos), determinismo e indeterminismo) que conlleva a consecuencias prácticas dañinas y muy peligrosas."
Precisamente mi ataque va a la carencia de método científico en buena parte de la psicología, basada en postulados dualistas y mentalistas (cuyo cerebro director es un versión moderna del alma o psique) que impiden el avance del conocimiento científico, por no hablar de indeterminismo; fíjate que ni tienen claro el objeto de estudio de su disciplina. Tal falta de método científico conduce a teorías erróneas, estas nos llega al público a través de revistas y de medios, y la aplicación tecnológica de esta errónea teoría conduce a mantener ciertas problemáticas, o cuanto menos, a no mejorarlas; y una mejora aplicada, a parte del enriquecimiento de conocer, debería ser el objetivo de la ciencia cómo actividad humana.
No obstante, si sigues viendo una crítica a la ciencia en mi comentario que yo no vea, te agradecería que me la hicieras ver de forma constructiva para poder dialogar y enriquecernos mutuamente.
#8 vaya joer... puto bocazas soy...
#1 Te noto tenso. Anda, tómate un trankimazin
Un problema muy habitual cuando no se disponen de métodos de comunicación alternativos