El tabaco sigue siendo la segunda sustancia adictiva más consumida (solo por detrás del alcohol) y suma nuevos adeptos muy jóvenes año a año. Cada cigarrillo afecta a nuestro organismo y nos recorta minutos, horas, años de vida. El cambio el tabaco por el vaper es una falsa alternativa. Algunas enfermedades disminuyen su riesgo a medida que pasan años desde que se dejó de fumar (infarto, ictus, diabetes, enfermedades oculares y demencia) pero otras, como la pérdida de capacidad pulmonar, una vez perdidos los alveolos, no se pueden recuperar
