Hace 3 años | Por jm_naron a defensa.com
Publicado hace 3 años por jm_naron a defensa.com

El seguimiento del patrullero de la Royal Navy británica HMS “Mersey” (P-283) a un submarino ruso que navegaba en superficie en aguas cercanas al Reino Unido es un nuevo episodio del creciente control mutuo a que ha conducido la tensión entre Rusia y la OTAN. Fue el 26 de febrero cuando el patrullero de altura Offshore Patrol Vessel (OPV) de la clase “River” detectó mientras estaba de guardia al submarino de ataque de tipo diésel del Proyecto 636.3, clase “Kilo” avanzada según la OTAN, “Rostov on Don” (B-237) navegando en el Mar del Norte y el Canal de la Mancha en su viaje desde el Báltico al Mediterráneo.

Comentarios

P

No me parece para tanto, es el problema que tiene Rusia para moverse entre sus costas, que tiene que dar la vuelta a Europa.