Fue un golpe de "chapa y pintura". Asunto zanjado. El Sailing Yatch A (SYA), el mayor yate de vela del mundo propiedad del magnate ruso Andrey Melnichendko, no va a denunciar al patrón del pequeño velero cargado de niños que el 29 de marzo chocó contra su casco, cuando se encontraba fondeado en la ría de Vigo, y le provocó algunos desperfectos menores.