Que Miguel Ángel Rodríguez tiene un estilo bronco, ya lo sabemos todos, pero lo que dice tampoco cae del cielo, la independencia judicial se ve muy tocada cuando coinciden cambios de jueces, parentescos y ascensos ministeriales justo en medio del proceso. Eso es lo que huele mal, y señalarlo no es fango, es poner sobre la mesa lo que la prensa amiga del Gobierno nunca cuestiona.
Y la izquierda que ahora se rasga las vestiduras con lo de "respetar a los jueces" son los mismos que llevan años hablando de lawfare cuando les conviene. O sea, que se pongan de acuerdo: o respetamos las resoluciones siempre o no valen dobles varas de medir. Porque aquí lo que de verdad quema no es lo que diga MAR, sino la falta de coherencia de quienes creen que la Justicia solo funciona cuando apunta al adversario.
Y la izquierda que ahora se rasga las vestiduras con lo de "respetar a los jueces" son los mismos que llevan años hablando de lawfare cuando les conviene. O sea, que se pongan de acuerdo: o respetamos las resoluciones siempre o no valen dobles varas de medir. Porque aquí lo que de verdad quema no es lo que diga MAR, sino la falta de coherencia de quienes creen que la Justicia solo funciona cuando apunta al adversario.