"Ese es uno y ahí tienes otro. ¿Ves ese de ahí? Era un bar. Ahora tiene cuatro habitaciones dentro". Habla una vecina de Vallecas y lo que señala con el dedo son locales a pie de calle que en su día acogieron fruterías, mercerías, droguerías, tiendas de ultramarinos, farmacias o sucursales bancarias y ahora han mutado en viviendas. En algunas habitan familias que se han resignado a hacer su día a día en espacios que, advierten desde una asociación vecinal de la zona, están mal ventiladas.