España está apostando fuerte por el desarrollo y creación de nuevos centros de datos. Y aunque eso atrae inversión, también puede acarrear problemas para los consumidores. En especial uno muy claro: que paguemos más por la luz. Una investigación de Bloomberg revela cómo la creación de nuevos centros de datos hace que el consumo energético se dispare, afectando los precios de la electricidad en las regiones circundantes. En Estados Unidos, durante los últimos cinco años, en algunas zonas cercanas a estos centros la factura ha subido un 267%.