El día después de los rectores de la Universidad de Murcia y el clientelismo pepero en la Región

Sirva este artículo de homenaje a Pepe Orihuela, único rector de la Universidad de Murcia al que he votado desde que soy profesor de la institución (profesor asociado en aquellos tiempos) y que nunca me defraudó. Ahora toca hablar de los demás, a quienes nunca voté y que siempre me defraudaron.

Ayer me llegó al correo un comunicado de la Junta de PDI de la Universidad de Murcia (el Comité de Empresa de los profesores funcionarios de nuestra universidad). Paso a copiarlo:

LA JUNTA DE PDI DE LA UNIVERSIDAD DE MURCIA SOLICITA AL RECTOR QUE CONVOQUE ELECCIONES DE MANERA INMEDIATA

La Junta de Personal Docente e Investigador (PDI) de la Universidad de Murcia desea reconocer el esfuerzo y la dedicación del Rector en el desempeño de un cargo tan exigente como la dirección de nuestra institución. A lo largo de estos años, su gestión ha estado marcada, como es natural en responsabilidades de esta envergadura, por aciertos y también por errores, y agradecemos el compromiso personal y profesional demostrado.

 Sin embargo, tras la confirmación pública del 19 de septiembre de su condición de Secretario General de la CROEM in pectore —reconocida por el propio Rector y por dicha entidad—, consideramos que concurre un conflicto de intereses, o al menos su apariencia, que puede comprometer la integridad institucional y la ética pública inherentes al cargo. Una situación de esta naturaleza resulta difícilmente compatible con la dirección de una universidad pública, que debe regirse por los principios de transparencia, independencia y dedicación exclusiva a la comunidad universitaria.

 Por todo ello, y en beneficio de la institución que compartimos y apreciamos, la Junta de PDI le solicita que convoque elecciones de forma inmediata, de manera que la Universidad de Murcia cuente con una dirección libre de cualquier posible conflicto de intereses y plenamente comprometida con su exclusiva responsabilidad universitaria.

Efectivamente. La CROEM (Confederación Empresarial de la Región de Murcia, esto es, la patronal que agrupa a las empresas murcianas) ha fichado como nuevo Secretario General a nuestro actual rector José Luján www.laverdad.es/murcia/croem-ficha-rector-umu-jose-lujan-nuevo-2025091 Y lo ha hecho público cuando aún le quedan bastantes meses de mandato como rector. El conflicto de intereses es obvio y la Junta de PDI (nada revolucionaria ni subversiva, sino "moderada" como ella sola) no ha tenido más remedio que pedir su dimisión.

El salto del rector de la Universidad de Murcia a entidades vinculadas a los centros de poder murcianos controlados por el PP (en el caso de la CROEM podríamos discutir si el PP la controla a ella o ella controla al PP, pero es indubitado que están a partir un piñón) no es nuevo, sino una tradición. Véase el ejemplo del rector Jose Antonio Cobacho, que compatibilizó con el sillón rectoral sendos cargos en el Consejo Jurídico de la Región de Murcia (a propuesta del Gobierno regional) y de consejero en la caja de ahorros Cajamurcia, también a iniciativa de los mandamases peperos. Aparte de estos cargos, cuando Cobacho dejó el rectorado fue inmediatamente nombrado (a propuesta del Gobierno regional) presidente del Consejo Económico y Social de la Región de Murcia murciaeconomia.com/archive/56420/sin-sorpresas-el-gobierno-propone-a-j

En el caso de Cobacho, yo llegué a promover una demanda ante la Sala de lo Contencioso del TSJ de Murcia para que se declarase su incompatibilidad por conflicto de intereses www.lavanguardia.com/local/20121226/54358327114/estudiantes-piden-el-c El TSJ la tramitó con extraordinaria lentitud y, al final, la archivó por pérdida sobrevenida de su objeto...porque durante ese largo periodo de tramitación a paso de tortuga Cobacho dejó de ser rector de la UMU.

Lamentablemente, es tradición desde hace lustros que el rector de la Universidad de Murcia tenga excelentes relaciones con el Gobierno autonómico, que dicho Gobierno le coloque o promocione para la obtención de otros altos cargos durante y después de su mandato. Y que, por supuesto, el rector no haga la menor crítica al Gobierno regional, no le demande ante los tribunales ni denuncie en prensa la precariedad que sufrimos por la falta de financiación pública, mientras la universidad privada UCAM, controlada por la secta de los kikos, no cesa de recibir prebendas públicas. Por eso siempre digo que Murcia, más que facha, es feudal-clientelar. El Gobierno regional se asegura el control de las instituciones mediante favores, clientelismo y persecución del disidente. Su máximo interés es colocar en la cúpula de esas instituciones públicas a personas amigas que lo serán más y más conforme vayan recibiendo recompensas.

Sólo hubo una excepción: Pepe Orihuela. Este profesor de la Facultad de Matemáticas plantó cara a Juan María Vázquez, candidato a rector avalado por el PP tras el fin del mandato de su querido Cobacho. Orihuela ganó por la mínima y a Vázquez, como no pudieron colocarlo de comisario político en la UMU, le hicieron diputado, senador y Secretario General de Ciencia e Innovación (y finalmente Consejero de Medio Ambiente, cargo que ostenta ahora mismo) es.wikipedia.org/wiki/Juan_María_Vázquez Y Orihuela fue el rector más decente e independiente que hemos tenido. Le hicieron la vida bastante imposible, y cuando su mandato acabó no optó a la reelección (y volvió a su cátedra de matemáticas, para él no había cargos-regalo ni tampoco los habría aceptado). Y retornamos al ciclo pepero que ojalá algún día podamos romper.