Parientes salvajes de los perros, los zorros siempre nos han fascinado por su elegancia y astucia: mascotas para unos, enemigos para otros e incluso adorados como dioses por algunos. Las mejores fotos y datos curiosos sobre estos esquivos animales.
Aquí va anécdota laaarga que viví en persona, y que me encantó:
Junio de 2016 (año arriba o año abajo). Ejercicio de tiro nocturno con fusiles de asalto en el campo de maniobras de Barbate (Cádiz). Una línea de veinte tiradores haciendo fuego (PIM PAM PUM, TAC, TOC, etc.)
Vuestra querida meneante QAR estaba en espera de que terminara la primera línea para ocupar su puesto de tiradora junto a otros compañeros. Mochilas en el suelo. Noche cerrada. Ruido de órdenes y de disparos…
De repente veo unas sombras que se acercan a nuestras mochilas. Unas sombras pequeñitas. Pienso que se trata de conejos, pero cuando observo que esos “conejos” se ponen a olisquear y a arañar nuestras mochilas entiendo que los herbívoros no actúan así. Así que enciendo la linterna.
Mientras tanto, no lo olvidemos: ¡POM PUM TAC, Etc…!
Al enfocar la luz sobre aquellas pequeñas sombras me encuentro a tres cachorros de zorro. Tres zorritos que estaban intentando robarnos los bocatas que llevábamos en las mochilas. Yo nunca había visto un zorro fuera de un zoológico, y de repente me encontraba con tres cachorros a mis pies, en medio de un ruidoso ejercicio de tiro, que pretendían robarme el bocata que guardaba en la mochila. Me faltan palabras para explicar lo que sentí.
Luego entendí que la madre los había parido junto al campo de tiro, y que se habían criado entre disparos desde que nacieron. Y paradójicamente por eso mismo no temían a los humanos, porque pocos sitios hay tan seguros como un lugar así (será ruidoso ocasionalmente, pero los cazadores no pueden acceder y al ser un lugar agreste siempre hay presas disponibles).
Y aquella experiencia, amiguitos, es una de las más bonitas que disfruté en mi vida de milica.
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Aquí va anécdota laaarga que viví en persona, y que me encantó:
Junio de 2016 (año arriba o año abajo). Ejercicio de tiro nocturno con fusiles de asalto en el campo de maniobras de Barbate (Cádiz). Una línea de veinte tiradores haciendo fuego (PIM PAM PUM, TAC, TOC, etc.)
Vuestra querida meneante QAR estaba en espera de que terminara la primera línea para ocupar su puesto de tiradora junto a otros compañeros. Mochilas en el suelo. Noche cerrada. Ruido de órdenes y de disparos…
De repente veo unas sombras que se acercan a nuestras mochilas. Unas sombras pequeñitas. Pienso que se trata de conejos, pero cuando observo que esos “conejos” se ponen a olisquear y a arañar nuestras mochilas entiendo que los herbívoros no actúan así. Así que enciendo la linterna.
Mientras tanto, no lo olvidemos: ¡POM PUM TAC, Etc…!
Al enfocar la luz sobre aquellas pequeñas sombras me encuentro a tres cachorros de zorro. Tres zorritos que estaban intentando robarnos los bocatas que llevábamos en las mochilas. Yo nunca había visto un zorro fuera de un zoológico, y de repente me encontraba con tres cachorros a mis pies, en medio de un ruidoso ejercicio de tiro, que pretendían robarme el bocata que guardaba en la mochila. Me faltan palabras para explicar lo que sentí.
Luego entendí que la madre los había parido junto al campo de tiro, y que se habían criado entre disparos desde que nacieron. Y paradójicamente por eso mismo no temían a los humanos, porque pocos sitios hay tan seguros como un lugar así (será ruidoso ocasionalmente, pero los cazadores no pueden acceder y al ser un lugar agreste siempre hay presas disponibles).
Y aquella experiencia, amiguitos, es una de las más bonitas que disfruté en mi vida de milica.
Como curiosidad , en Alcoy tenemos nuestra propia familia de zorros negros mutantes
https://blogs.20minutos.es/cronicaverde/2012/02/06/descubierta-en-alcoy-una-poblacion-mutante-de-zorros-negros/