Hace 9 años | Por mr_b a yorokobu.es
Publicado hace 9 años por mr_b a yorokobu.es

Dice la sabia voz del DRAE que un meapilas es un santurrón. Pero no nos cuenta que además de eso, que dicho así, a palo seco, puede parecer hasta entrañable, tiene unas connotaciones negativas bastante más fuertes. Porque un meapilas es una persona de esas que se pasa la vida rezando u ordenando la vida de los demás según su dignísima y perfectísima moral religiosa, pero que luego, por detrás, hace todo lo contrario de lo que predica. Es decir, un hipócrita de tomo y lomo, lo que le hace aún más asqueroso.