Con el objetivo de ser más letales, protegerse frente al enemigo o matar desde más lejos, durante las dos Grandes Guerras el wolframio y el molibdeno fueron la avanzadilla de una verdadera revolución de los metales que se desarrollaría a lo largo del siglo XX y que continúa hoy en día con las llamadas tierras raras.  
      | 
 etiquetas:  historia ,   wolframio ,  molibdeno ,    guerras mundiales