Hace 8 años | Por --470060-- a jotdown.es
Publicado hace 8 años por --470060-- a jotdown.es

Winston Churchill acababa de sustituir a Neville Chamberlain como primer ministro británico y dijo a sus conciudadanos: «No tengo nada que ofrecer sino sangre, esfuerzo, lágrimas y sudor». Otro elemento igualmente importante para la terca resistencia británica contra los nazis durante la II Guerra Mundial, si cabe más prosaico y elemental que todos los anteriores, pero al mismo tiempo más elevado, fue el té. Sin el té, quién sabe cuánto hubiera durado la moral de ingleses, irlandeses, galeses y escoceses.

Comentarios

m

"Todo se te para"