Hace 5 meses | Por Ben_Really a xataka.com
Publicado hace 5 meses por Ben_Really a xataka.com

El ser humano ha desarrollado una peculiar relación de amor y odio hacia las flatulencias. En función del contexto y de las personas involucradas, un pedo puede interpretarse en clave cómica o puede obtener un significado ofensivo. Si una persona optara por lanzar uno sobre tu cara, tu lógica reacción oscilaría entre la indignación y la agresividad. Nadie podría culparte.

Comentarios

emmett_brown

Habla de flatulencias. Imagino que por borracheras serían muchas más.

Ehhhh ammigo, a que no hay huevosh a tomar la Bashtilla?

Kamillerix

Si viene de lejos: "petus sunt aerem corruptus expelitus per viam merdosam" o así me lo contaba mi papá...

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