Hace 6 años | Por Feindesland a javier-perez.es
Publicado hace 6 años por Feindesland a javier-perez.es

El profesor vuelve a mirar el reloj y ensaya una mueca irónica, dirigida más a sí mismo que a la luz de la ventana. Se levanta un instante y llama al portero automático. No responde nadie y vuelve al banco con una sonrisa, la primera del día, la primera de mucho tiempo, pensando que no es mala cosa tentar de vez en cuando a lo imposible. Es perfectamente cabal creer en los imposible: lo que es de loco es creer en lo improbable...

Comentarios

Potopo

El relato me ha gustado, pero Menéame tiene sus propias normas y lo de publicitar tu propio blog no está bien visto (si lo estuviese yo también lo haría). Por lo tanto me veo obligado a votar el envío como microblogging

Feindesland

#1 No es exactamente mi blog, porque no soy el autor... Pero casi...

A lo mejor tienes razón.

Gracias.