Hace 3 años | Por ElLocoDelMolino a lavanguardia.com
Publicado hace 3 años por ElLocoDelMolino a lavanguardia.com

A veces, el arte tiene delito. El origen del cubismo y la consiguiente transformación de la pintura y la escultura tienen detrás uno de los robos más rocambolescos de la historia del arte, con Pablo Picasso como protagonista y gran beneficiario. El episodio data de hace más de un siglo. Se trata del hurto de dos bustos ibéricos en el Museo del Louvre, en marzo de 1907 que Picasso escondió y fueron su inspiración para pintar las Señoritas de Avignon. El pastel se descubrió en agosto de 1911, a raíz del robo de La Gioconda.